Sin palabras, con una mirada del enamorado o enamorada. La observación punteada por la música del personaje es mejor que mil líneas de díalogo para expresar el increíble acto de enamorarse.

Una mirada vale más que mil palabras.

Así pasa en Shitsel la primera vez que ve a Elisheva o cuando su sobrina espía através de la reja a un muchacho que pide ayuda a Dios para no cometer más actos impuros con su cuerpo.

También se puede crear un efecto de posproduccion de imagen que focalice la mirada del enamorado, su atención rendida, en su objeto de amor. Por ejemplo, eso pasa la primera vez que Anthony Jr. ve a una chica de la que se prenda en una de las obras de la construcción de su padre, Tony en Los Soprano.

En la serie Fleabag Waller-Bridge se enamora de un sacerdote. Pero no es un flechazo, no es amor a primera vista. Sin embargo a medida que lo va conociendo, y descubre que bebe y tiene sentido del humor, le mira con nuevos ojos y se enamora de él. Obviamente lo peor que le podía pasar a la alocada y cabreada y triste protagonista de Fleabag es colgarse de un cura. Ironías del destino.