![Todo lo que quisiste saber sobre el ego en "Mad Men"](https://i0.wp.com/serietelevision.com/wp-content/uploads/2023/12/Joan-Holloway.Mad-Men.webp?resize=800%2C440&ssl=1)
«Mad Men» va sobre el ego, lo cual implica deseo y miedo, ilusión e insatisfacción, ansias, ambiciones, hambre por el placer, las posesiones, el poder y el reconocimiento, y miedo a perder todo lo que se posee. Significa ausencia absoluta de paz interior.
Sylvia, la vecina de Don Draper, que lo ama y, a la vez, no puede estar con él, le dice siempre después de hacer el amor: sólo quiero que tengas un poco de paz, sólo quiero que seas feliz.
Ay, pero Don no puede porque Don y el resto de personajes de «Mad Men» están atrapados en espejeante y engañoso laberinto del ego.
Los celos y la envidia forman parte del laberinto. Don está celoso del talento de Ginsberg, su creativo, cuando a éste se le ocurre una idea mejor que la suya para una campaña de polos. La idea de Giinsberg no sólo es mejor sino que también es más graciosa (con un niño lanzándole un helado a la cara de un policía) De camino a la presentación con el cliente, Don se deja a posta en el taxi la campaña Ginsberg y le hace luz de gas.
Pero si algo es «Mad Men» es una serie sutil que va en contra de las expectativas de los espectadores. Cuando Joan se acuestra con Herbert, el dueño gordo y viejo de los concesionarios de coches a cambio de que vote a favor de la campaña de Jaguar de la agencia, Don Draper se presenta en su casa para pedirle que no lo haga, que no merece la pena, por cierto, en un magistral golpe maestro de guion utilizando el flashforward porque Joan ya se ha acostado con el tipo. Pero, según el creador de la serie, Matthew Weiner, Don basa su valía en su creatividad y va a disuadir a Joan sólo porque quiere ganarse la cuenta de Jaguar con su talento.
La frustración de Megan Draper
Por su parte, Megan quiere ser actriz. Le asegura a Draper que no se siente a gusto en el mundo de la publicidad. Abandona su trabajo en la agencia. Sin embargo, más tarde, le pide el favor a su marido de que la meta en el casting de un anuncio de zapatos y trabaja como actriz en un culebrón en la tele. Aunque Megan nunca está satisfecha. Se siente muy frustrada porque, en realidad, ella quiere actuar de verdad. Quiere hacer teatro del bueno.
«Mad Men» es un Tractatus de cómo funciona el ego. Don quiere poseer a Sylvia, su vecina y amante, como a un objeto de su propiedad y la encierra en una habitacion de hotel, pidiéndole que siga sus órdenes y sólo haga lo que él le pida.
La competencia entre los creativos se basa en el ego
Ted dirige su primera reunión de creativos en la agencia de Draper. El jefe de creativos afea a Don que llegue tarde a la primera reunión con el equipo como nuevos jefes, una reunión que versa sobre los beneficios de la margarina. Don se venga de Ted y lo emborracha, dejándolo fuera de combate. Peggy critica lo que ha hecho a Don.
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Matthew Weiner describe el inicio de su carrera como «un tiempo oscuro. El negocio del espectáculo se veía tan impenetrable que, eventualmente, dejé de escribir. Empecé a mirar la tele todo el día y a estar tirado. Mi madre me llamaba para que llevara a mi cuñado en coche al aeropuerto. Eso es el tipo de basura que hacía en vez de escribir. Me sentía la persona más inútil y sin valor del mundo».
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Dónde puedes ver «Mad Men»? En Amazon Prime Video
¿De qué va? Aclamada serie dramática que narra los comienzos de una de las más prestigiosas agencias de publicidad de los años sesenta, y centrada en uno de los más misteriosos ejecutivos de la firma, Donald Draper, un hombre con un gran talento. «Mad Men» es la mirada a los hombres que dieron forma a las esperanzas y sueños diarios de los americanos de la época. En 1960 la publicidad era considerada una de las profesiones con más glamour. Era un momento de gran ebullición en todos los sentidos; la manipulación profesional y el acoso sexual son parte del trabajo y de los negocios. Sterling Cooper Advertising diseñaba mejor que nadie las campañas de publicidad. Su lema era: «No importa lo que seas. Lo importante es cómo lo vendas…»
Lo mejor: La verdad que emana.
Lo peor: Nada.
¿Con quién verla? A solas.
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Escritora. Autora junto con Gonzalo Toledano del libro «Cómo crear una serie de televisión» (Ediciones T&B) y «El verdadero tercer hombre» (Ediciones del Viento) «Los crímenes de Atapuerca» (Caligrama)
Periodista de RTVE.